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sábado, 1 de septiembre de 2012

SI YO TE HABLARA DE AMOR


La timidez me hizo parco en palabras habladas, pero la palabra escrita salía con facilidad de mi mente. En mi adolescencia, la timidez se acentuaba con el sexo femenino, encontrar la palabra justa en el momento oportuno era toda una odisea. Pronto descubrí una manera especial de sentir la vida y empecé a escribir poesías donde expresaba mis sentimientos, todo aquello que quería que llegara a otra persona, a veces una amiga, a veces un amor, a veces para nadie. Esa forma de sentir aumentaba la realidad de los sentimientos y los desamores se volvieron dramas terribles. Desde que tuve conciencia del amor siempre me sentí enamorado, amar y ser amado era el objetivo de mi vida adolescente. Con mis cualidades solo llegaba al grado de amigo, muy pronto descubrí que a las chicas les gustaba una de mis cualidades, la sensibilidad poética, y utilicé las poesías para llegar a ellas. La sensibilidad era todo un problema, pues las lágrimas afloraban con facilidad y eso a veces es un incordio, por cierto, que después de mi contacto con la muerte, esa sensibilidad ha aumentado, y ahora, cuando estoy solo, veo las películas llorando, todo un problema que tengo que ir controlando. Pero no era de eso de lo que estaba hablando si no de la sensibilidad poética.

Como me costaba trabajo comunicar mis sentimientos, siempre utilicé la poesía para que ellas supieran lo que sentía. Era otra manera de hablar. A comienzo de 1977 estaba enamorado de una chica a la que llamaba Yusy, “La Loquilla de arriba” y a la que le dirigía mis poesías. En una ocasión, después de una charla con ella, le entregué una poesía titulada “Declaración de un poeta”. Era una declaración de amor en toda regla, pero me contestó que no la entendía. En el recreo le hice una estrofilla rápida y me contestó: “esta es muy corta”. Durante una clase sin que el profesor me viera escribí otra poesía más larga que titulé: “Para cuando lo leas” (y que conste que es difícil escribir mientras el profesor explica). Al salir de clase, por el camino de vuelta a casa, se la entregué, eran dos folios cuadriculados escritos con bolígrafo verde que me devolvió al día siguiente y que ahora tengo en mis manos. Está escrita a la una del mediodía de marzo de 1977, pero no dice que día. Hoy esa adolescente será una señora de cincuenta años, con un marido probablemente aburrido y unos hijos a punto de volar...A Yusy, con el recuerdo del corazón......

PARA CUANDO LO LEAS

Si yo te hablara de amor

te podría dar felicidad,

creo que bien sabes

mi corazón te sabría amar.

—Eso te dije yo—

Es corta tu poesía

—me dijiste tú—

Abstracta como la soledad

breve como la vida

oscura como un callar.

—añadiría yo—

Aparecía tu sonrisa en mi mente

y ya no sabía controlar

las imágenes del pensamiento

que tratabas de ocultar.

Quizás seas tú, mi amiga

escondida en el azar

ocultando la quimera de tu vida

en un continuo saltar.

Tus ojos me dicen deseos,

me piden besos que no puedo dar.

Mis labios dicen “te quieros”

que no puedo pronunciar.

Quisiera escribirte cosas bonitas

alegres e interesantes

–¡lo siento!– pero en este instante

mi pensamiento no me da más.

Sigo pensando en tus ojos

que me dicen la verdad

pequeños, como la primavera

bonitos, como la arena del mar.

Veo tu sonrisa volar

a lo alto de la montaña

rodeada de mariposas

que tus labios quieren besar

y tu piel acariciar.

Quisiera contarte mis sueños

llenos de amor y paz

y solo encuentran el silencio que besa

la soledad.

Si yo te hablara de amor

te podría dar felicidad,

creo que bien sabes

mi corazón te sabría amar.

No creas que estoy enfadado con ella

ni contigo, ni con las estrellas

solo con el amor que me esquiva,

que me huye,

que no me deja llegar a ti.

Continúo escribiendo, sin pensar

este momento del pensamiento

a la una del mediodía del mes de marzo

de mil novecientos setenta y siete

y siento

que no es lo que quisieras oír del viento.

Quisiera escribirte cosas bonitas

alegres e interesantes

–¡lo siento!– pero en este instante

la soledad vuelve a brillar

y el profesor me va a pillar.

((Andos))

2 comentarios :

Preciosa poesia, me ha encantado...gracias por compartir tú arte...

Hola! qué tal? Acabo de descubrir tu blog, le he estado echando un vistazo y me ha gustado mucho, volveré a visitarlo más a menudo, te mando un abrazote!

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